Aunque aveces tengo buenas ideas, en General No

domingo, 6 de diciembre de 2009

Cierro la boca, pero no el alma

Amiga mia:
Ya no se como explicarte que te siento triste y perdida. Cuando te conocí inventabas historias fascinantes y ahora sos sólo una oyente más, del montón. No entiendo como puede ser, que con esa capacidad tan importante de Liberarte, te sigas atando a cosas que jamás pensaste imponerte.Siento que, ademas, tu repentino fanatismo sólo nace de una especie de complementación humana, que te soy sincera: no creo que le haya funcionado a ningún ser. Te explico por qué: si vos dejas de ser vos para ser amada y aceptada, pretendes ser la que encaja perfectamente con el otro individuo, pasas a ser sólo una sombra. Desarrollaste durante un par de años, un caracter impecable, multifacético y casi gruñón. Ahora extraño tus posturas tan anti cristianas/sociales/musicales/etc. Por que te conocí al borde de salir por la ventana y con unas ganas tremendas de desbordarte de ilusiones. Me pregunto quién va a querer cambiar el mundo conmigo ahora, que sólo me quedo esperando una mirada no-triste.Si, ya se, soy re egoista. Pero a veces mi tosudez me lleva a pensar que es imposible que me equivoque con esas cositas que voy percibiendo mientras camino, hablo y leo miradas. A veces, también, mi autodesvalorización me lleva a pensar que estoy Abandonada. Y ahora me siento asi. Es que puedo quererte tanto y quererte de cualquier manera; pero no con la mirada de burro de carga y ¿sabes qué?... No soporto que te vuelvas sumisa y dependiente de otro!. Si una vez creí que me podía liberar de todo, y vos misma me aseguraste que me estaba obsesionando. No hay motivos para cegarse asi. Sé que amas, amas con fervor. Pero también sé que naciste para otra cosa... y tengo miedo de que seas tan como yo, que te aferres a algo que está ahi, porque parece seguro, firme... pero a la primera tormenta se parte, podrido y en fin... te desates. Sabes de que te hablo, ¿No? No puedo pedirte que dejes de amar a nadie. Pero puedo pedirte que te ames mas a vos misma.

Sin más palabras. Me despido.

Julieta.

Pd.: cuando camine hoy por un centro comercial repleto de chusma y mediocridad, me imaginé de nuevo un mundo tan diferente... en el que sólo vos y yo (y 20 personitas más) seríamos Eternamente Alegres. Te adoro, Amiga mía.

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