"Poco a poco desapareció la música, y con ella esa sensación de honda alegría que me había acompañado los primeros años.La alegría, ¿Sabes? es lo que mas he añorado. Posteriormente, seguro que sí, he sido feliz; pero la felicidad es, respecto a la alegría, como una lámpara eléctrica respecto al sol. La felicidad siempre tiene un objeto, somos felices por algo, es un sentimiento cuya existencia depende de lo exterior. La alegría en cambio, no tiene objeto. Te posee sin ningún motivo aparente: en su escencia se parece al sol, arde gracias a la combustión de su propio corazón".
"Donde el corazón te lleve", de Susana Tamaro.
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